El aumento de glúteos, o gluteoplastia, es un procedimiento estético destinado a mejorar el tamaño, la forma y la proyección de los glúteos, buscando una silueta más armoniosa y proporcionada.
Existen dos técnicas principales para el aumento de glúteos:
Implantes de silicona: Consiste en la inserción de implantes específicamente diseñados para la región glútea, colocados a través de una incisión en el pliegue interglúteo. Este método es ideal para pacientes con poca grasa corporal.
Transferencia de grasa autóloga (lipofilling): También conocido como “Brazilian Butt Lift”, este procedimiento implica la liposucción de áreas con exceso de grasa (como abdomen o muslos) y su posterior inyección en los glúteos. Es adecuado para quienes desean aumentar el volumen glúteo y tienen depósitos de grasa disponibles.
El tiempo de recuperación varía según la técnica utilizada:
Implantes de glúteos: Generalmente, se recomienda evitar sentarse directamente sobre los glúteos durante las primeras semanas y utilizar prendas de compresión para reducir la inflamación.
Transferencia de grasa: Se aconseja no ejercer presión sobre la zona injertada durante al menos dos semanas y también usar prendas de compresión.
En ambos casos, es fundamental seguir las indicaciones del cirujano para asegurar una recuperación óptima y minimizar riesgos
Los candidatos ideales para el aumento de glúteos son personas saludables que buscan mejorar la forma y el tamaño de sus glúteos y tienen expectativas realistas sobre los resultados.
El Dr. Francisco Javier Quintero Segura es cirujano plástico en el IJCR, especializado en cirugía estética facial y corporal.
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